un mail que alguna vez escribí con mucha emoción, con sus faltas de ortografía originales y todo

Subject: alucinar.
Date: Fri, 21 Jul 2006 14:44:59 +0000

Bueno, nuevamente gracias a todos por los mails, las noticias y las ideas felices.
Como he recibido muchos comentarios alegres sobre lo que me esta pasando,q uisiera compartir con ustedes una experiencia que, jajajajajajajajajjaaaaaaaaa, es caracteristica mia.El Domingo a la tarde llegué a Praga, y ya les conte que salí, perí mucho dinero en rondas de cerveza, el mejicano me siguió hasta el infinito y más allá. etc. etc. Resulta que el martes me levanté con todas las intenciones de viajar a amsterdam, sobre todo porque ese mismo dia se terminaba mi pase de tren. Obviamente no pudo ser asi, ya que me levanté con 39 grados de fiebre y los gangleos que se me escapaban del cuello. Trate de ignorar mi enfermedad, y salí a caminar con unos amigos muy nionios que conocí que van a Yale. La cuestión es que en la mitad del recorrido decidí volver, porque mi cuerpo ya no respondia a mis ordenes. Cuando llegué al hostal tras lo que me gusta llamar una peregrinación, los duenios me hicieron ir al hospital en un remise. Nunca se les ocurrio que el remisero hablaba CHECO y los del hospital hablaban CHECO, asi que hace 3 dias estoy tomando remedios que probablemente sirvan para exterminar a la raza latinoamericana. POr cierto, esta aventurita al hospital me costó mis buenos 100 euros, por lo que mi billetera empezaba a sentir mucho vertigo y yo ya me veia tirada en la calle pidiendo monedas a cambio de un buen baile de ojos (por suerte tengo
habilidades). Finalmente me tuve que quedar una noche más en el hostal porque me sentía muy mal para viajar. Al otro dia me levanté a las 6 de la maniana para tomar el tren, y lo perdí. Decidí tomar el siguiente, entonces caminé hasta la otra terminal (salía desde ahí) y, como todo estaba en checo, le pregunté a la seniorita de viajes internacionales dónde me tomaba mi tren. Plataforma 6. Y el tren de la plataforma 6 llegó, 6 horas después, a BERLIN, no a AMSTERDAM. Se imaginarán que tiré mi valija al piso, y como buena demente que soy la empeze a patear, llorando y profanando. Hatsa que una seniora me vino a ayudar, y mientras me explicaba yo lloraba a lagrima suelta. Me tuve que tomar un tren y dos subtes hasta la terminal del tren que SI iba a AMSTERDAM. Y ahí, bueno, me relajé. me subí al tren y esperé lo mejor. Lo mejor. Si, a las dos horas de estar viajando, el tren se prendió fuego y lo tuvimos que evacuar. Obviamente estabamos en un pueblo periddo en el meido de la nada, y nadie hablaba espaniol ni inglés. Muy rudimentariamente trate de preguntar donde estabamos, y a la respuesta volví a preguntas "Ës en Alemania?', a lo que la muchedumbre contestó con una ola de risas y carcajadas que me enfurecieron. Asi que, ahi estaba, a las 12 de la noche en el meido de la nada, sola una vez más. Ah! Y con mi pase de tren ya totalmente vencido, y sin intenciones de comprar un pasaje. Finalmente, logré tomar un tren a Amsterdam, llegué a las 3 de la maniana. Claro que no fué una experiencia muy grata. Fuí hasta el hostal que estaba buscando y me recibió un hostil cartel que leía "FULL". Entonces seguí caminando por las calles desiertas con mi valija a cuestas, hasta que llegué a otro. Toqué la puerta y cuando pedí una habitación, un viejo ebrio y semi desnudo me dijo "Lo unico que te puedo ofrecer es dormiren el bar". Y el bar era un antro oscuro, con dos o tres cuerpos tirados en el piso, mucho olor a chivo, sillas sobre las mesas, y una butaca de cuero, donde se me ofrecia dormir. Y bueno, si no queda otra. Le pagué. Y cuando lo volví apensar, decidi salir a dar una vuelta a ver si conseguía otra cosa. Me metí en un hotel, y el duenio me trató de violar. ja. No puedo explicarlo entero porque es muy largo, pero tenía mi valija y mi mochila adentro de la recepción y me quería hacer entrar con un discurso que decía algo así 'Estas sola acá, tenes que venir a dormir en este colchón conmigo, tomamos unas cervezas, yo solo quiero ser tu amigo, tenés que confíar en mí, no te voy a devolver tu valija hasta que no entres'. No sé con qué magicas peripecias logré escapar con mis cosas. Me metí en el primer hotel que ví. Le conté todo al recepcionista, Sbastian, que pronto se volvió mi amigo, y me dió una habitación de ese hotel 4 estrellas por 100 euros dos noche. Genial. Me metí en la habitación y dormí a rienda suelta. Al otro dia me levante dispuesta a olvidar mis pormenores, por lo cual entré al primer negocio que ví y me comí una ensaladota gigante de hongos alucinogenos para festejar el dia del amigo conmigo misma. Bueno, y la historia es muy larga, la cuestión es que terminó de esta manera: yo caminando por la calle con mi madre y mi padre que no paraban de reirse, yo alucinando cosas, viendo calles
de colcer y arcoiris, pensando que caminaba por un bosque, la gente riendose de mí, y yo llorando sin parar al grito de 'SOY MUY JOVEN PARA MORIR'. En fin....lamento el mail largo, es que no quiero que se me pase esta historia de la cual después les contaré los detalles.
Los quiero mucho.
Y gracias por las alegrias.
Espero que sigan todos muy muy bien.
Dani, con resaca de hongos.
pd: por que entre los discos que me presto juampi hay uno de la oreja de van gogh??